La presión por el aumento en el consumo mundial genera problemas que no son simples de resolver, y que precisan ser pensados ahora para que no se vuelvan aún mayores. ¿Usted ya se detuvo para pensar en el volumen de residuos generados diariamente en su ciudad? ¿Y el destino final? ¿Usted sabe lo que se hace con él?
¿Cuántas veces por semana usted repite la tarea de embolsar sus residuos y colocarlos en la calle, esperando que alguien lo recoja y resuelva su problema? Esa es, de forma bien resumida, la tarea de sólo uno de los actores involucrados en ese proceso: el consumidor. Comerciantes, distribuidores, fabricantes e importadores completan esa lista y actúan en los dos sentidos de este proceso: en el sentido producción/consumo y viceversa (logística reversa).
Ciclo de vida del producto
Normalmente se piensa en el ciclo de vida del producto sólo en el sentido de producción. Como una serie de etapas que abarcan el desarrollo del producto, desde la obtención de materias primas e insumos para la fabricación, el proceso de producción, el consumo y aún hasta el descarte.
El modelo de ciclo de vida prevé un descarte apropiado de los productos post-consumo, pero concentra las atenciones en el sentido primario del proceso, que comienza en la producción y termina en el consumo.
La responsabilidad del manejo de los residuos, buscando minimizar su volumen y reducir los impactos causados a la salud humana y a la calidad ambiental, debe ser compartida entre fabricantes, importadores, distribuidores, comerciantes, consumidores y titulares de los servicios públicos de limpieza urbana y de manejo de los residuos.
O sea, se trata de un proceso complejo que no puede ser tratado de forma simple, al punto de ser representado por una secuencia simple de actividades.
Logística reversa
La logística reversa puede ser definida como un instrumento de desarrollo económico y social caracterizado por un conjunto de acciones, procedimientos y medios destinados a viabilizar la colecta y la restitución de los residuos sólidos al sector empresarial, para reaprovechamiento, en su ciclo o en otros ciclos productivos, u otro destino final ambientalmente adecuado.
Tal vez el término “instrumento” escogido para describir a la logística reversa pueda haber contribuido para la interpretación de que ciclo de vida y logística reversa son sólo procesos complementarios. Pero el hecho es que la logística reversa tiene papel fundamental en la evaluación y en la comprensión del ciclo de vida de cualquier producto.
Al comprender esta perspectiva más amplia del ciclo de vida se percibe que su gran enfoque está en la búsqueda de las mejores prácticas socioambientales para la producción y el consumo conscientes, incluyendo el uso eficiente de materias primas y energía y el encuadramiento en la jerarquía de gestión de residuos sólidos.
Beneficios del abordaje integrado
Para muchas empresas, ese tema es una cuestión de obligación, debido a normas y leyes que obligan a la práctica de la logística reversa para algunos segmentos. Pero existen muchos otros motivos relevantes que justifican la inversión en la evaluación completa del ciclo de vida del producto (incluyendo a su logística reversa):
- Mejora de los procesos, al observar el retorno de productos por problemas de calidad o insatisfacción de los clientes;
- Reducción de costos, a través del mejor aprovechamiento de la materia prima y de la mejora de los procesos;
- Generación de nuevos ingresos, visto que un programa de logística reversa abre nuevas oportunidades de negocio;
- Mejora de la imagen de la empresa, pues una empresa que piensa en el medio ambiente tiene una imagen mejor frente a sus consumidores;
- Diferencial competitivo, ya que la monitorización del ciclo de vida de los productos provee a las empresas informaciones diferenciadas de un abordaje tradicional.
Gestión del ciclo de vida del producto, logística reversa y gestión de residuos son temas aún no tan explotados en las empresas, pero que, conforme a lo ya expuesto, pueden traer muchos beneficios, principalmente si fueren acompañados de un sistema capaz de ofrecer recursos que facilitan esa gestión de forma integrada.